miércoles, abril 26, 2006

Día caluroso

Día caluroso, exhausto, cada vez me pongo más negra con eso de los rayos ultravioletas, además, a la hora que salgo del trabajo, está el sol en su máximo apogeo, para acabarla, tengo que caminar a mi casa, un buen tramo de terracería, donde han devastado los únicos árboles que tenía como esperanza, para evitar la insolación diaria.
Hoy me habló uno de mis pretendientes que se encuentra en Estados Unidos, realmente fue mi primer novio, el primer amor de secundaría, y después de 8 años, se sigue reportando. Él, es uno de los tantos indocumentados que se van a trabajar, y añoran regresar con mucho dinero.
Después de dos años en constante comunicación, me ha dicho que quiere casarse conmigo, yo nada más le digo que primero llegue y luego vemos, sinceramente dudo de sus “buenas” intenciones, corrijo, dudo de mis buenas costumbres.
Entre la platica, me dijo que me había llamado el día en que fui a bailar, y que se había puesto celoso. Digo, no es de extrañarse, una mujer como yo, sola, se puede considerar un verdadero milagro.
Cambiando el tema, Polo me recordó a este ex noviecito, en su fisonomía como su comportamiento, tal vez por eso, sentí una atracción muy familiar hacia él.
Ahora comprendo por qué tanto interés al tal Polo…

Aaah! (este "aaah!" es de suspiro resignado) lo que hace un hombre, en una mente mal sana como la mía...

Geisha

1 comentario:

Anónimo dijo...

El calor me pone de mal humor. ¡Pinche deforestación!

Déjalo que llame, que se ponga algo celoso, quizá regrese con ritiharta lana, pero quizá ya tiene una familia bonita por allá.

Problema resuelto.

Eso de encuentran rasgos familiares en personas con quienes nos cruzamos me suena conocido.