domingo, octubre 25, 2009

Decidí pasarla bien

Por más que me negué, no pude contener las ganas de reunir a mis amigos, digo, a veces cuando uno cumple años acceden a hacer lo que quieres, ja.
Esta vez sólo les avisé a mis amigos más frecuentes (los escritores) hubo mole, horchata, café, vino, noche de antro, unas frases en voz alta de Bernhard, una felicitación escrita en árabe, unas llamadas, unos mensajitos sugerentes, algunas declaraciones que no me esperaba, un francés amable y encamable, largas pláticas con mis amigas, en fin, todo aquel que tenía que estar, estuvo.
El mensajito más lindo, fue el del gordo…

‘Lo malo de los cumpleaños es que te recuerdan lo increíblemente viejo que eres, pero también son buenos para disfrutar de una bocanada de aire, un pestañeo, un beso y poder decirte con pretexto justificado lo mucho que te quiero y cuanto agradezco el conocerte. Besos y espero pronto hacerte el amor.’


Otro de los mensajes interesantes, fue este me dejó algo sorprendida, pues es de un lector amable con el que he conversado en algunas ocasiones:

dónde vas a estar
*** dijo (23/10/2009 a las 23:57):
Estoy celebrando tu cumpleaños...
*** dijo (23/10/2009 a las 23:58):
Nunca los vas a encontrar
*** dijo (ayer a las 0:41):
A la distancia te amo Geisha... te amo
*** dijo (ayer a las 0:45):
Me emborraché con dos mujeres, una bella y otra no tan bella
*** dijo (ayer a las 0:54):
Soy tuyo Geisha, nótalo
**** dijo (ayer a las 0:55):
Podemos hablar después de esta borrachera... no te escondas
*** dijo (ayer a las 0:56):
O podemos armar un diálogo liberrimo, a través de la red, tú escoges
*** dijo (ayer a las 0:58):
Voy por una cerveza
*** dijo (ayer a las 1:00):
Apuesto a que estás peda, Geisha

Siendo sinceros a esa hora, en efecto, estaba borracha, bailaba en el Central sones jarochos, con tres copas de vino encima, ¡puf!, mortales para mí que no aguanto nada, porque llegué al punto de decirle a dos que tres personitas que las amaba.
Fue un día mucho mejor de lo que esperaba, cumplí 26 años calmada al lado de personas que estimo; trabajé en la mañana, en la tarde fuimos a comer a mi casa, me fui al café en la tardecita, luego el vinito, luego el bar Central con francés incluido y este fin de semana decidí darme un regalo chido; sábado y domingo tomé un curso de Reiki, una de las cosas más impresionantes que me hayan pasado en la vida.
Por supuesto estas letras resultan insuficientes para contarlo todo, además que aún no es el momento.
Mientras tanto, no puedo quejarme agradezco a Dios y a la vida por darme lo que tengo, que en definitiva es mucho más de lo que puedo esperar.

Gracias por darse una vuelta por aquí, buena vibra para todos ustedes.

5 comentarios:

iL Hell Dogma dijo...

oye pues si estuvo chido el festejo, que bueno que la pasaste bien.

saludos

Anónimo dijo...

Y qué bueno que esoges a tus amistades, o sea que está cerrado el grupo.

Bob dijo...

La pasaste como tu querias pasarla. Simplemente fuiste feliz. Eso es lo más importante.

Bob dijo...

La pasaste como tu querias pasarla. Simplemente fuiste feliz. Eso es lo más importante.

epistolario segun san alvaro dijo...

Hola me parece gennial tu blog, un pacer visitarte.